El turismo
ambiental es el fenómeno de aumento de viajes a los lugares de interés y donde su riqueza es la fauna y flora, además de los grandes
recursos naturales existentes.
Se trata de viajes que se centran en el entorno
ecológico del lugar de destino, básicamente respetan la ecología del planeta y el entorno, además generalmente son
lugares rebosantes de belleza natural y muy asombrosos.
De igual manera,
el turismo ambiental puede incluir viajes a zonas únicas y en peligro de extinción, como por ejemplo las Islas Galápagos, constituyen un archipiélago del océano pacífico ubicado
a 972 km de la costa de Ecuador.
El concepto de
turismo ecológico hace una directa alusión a las preocupaciones ecológicas y
socio-culturales del mundo a través de la experiencia de primera mano, por lo
tanto en este tipo de turismo se es más activo en la conservación y el cambio
del medio ambiente hacia su preservación.
No sólo es el
turismo medioambiental una aventura en el desierto, destinado a ayudar a salvar
el planeta, sino que también expande la industria del turismo y la hace más
rentable para los países en vía de desarrollo donde los trabajos son escasos y
las economías se mantienen en constante lucha.
Aunque los objetivos ambientales del
turismo se determinan por las buenas intenciones, hay en ocasiones
consecuencias negativas que se derivan de la práctica, gracias a personas y
entidades sin escrúpulos que se escudan en este nombre y en el cuidado del
medio ambiente para enriquecerse afectando el entorno natural.
Los viajes a lugares remotos donde la
fauna prospera puede ser costoso para el medio ambiente debido a la utilización
de combustible. El alojamiento y el estilo de vida de las personas también
pueden impactar el medio ambiente local.
La construcción de nuevos alojamientos
a menudo significa la destrucción de un ecosistema natural, todo para llevar un
estilo de vida occidental en un país en desarrollo en donde significa la
eliminación inadecuada de los residuos, mientras se olvida por completo la importancia del reciclaje.
Con este fin, debe haber una mayor
regulación, como también una buena educación para los viajeros y un alto
respeto por el entorno.
Fuente: Blog de Turismo Ambiental
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